El Reino de Tonga es un pequeño país insular en el centro del Pacífico Sur. En 2006 su población estimada de 100.000 personas estaba distribuida en 36 islas habitadas, con dos tercios de la población concentrados en la isla principal de Tongatapu1. Si bien el país cuenta con muchas exportaciones agrícolas, a partir de la década de 1990, el turismo se ha convertido en una fuente cada vez más importante de ingresos, que en 2006 se estimaba representaban el 15% de la economía1. En 1994, este turismo comprendía dos operadores, que llevaba a los turistas a ver ballenas jorobadas y, a veces, a practicar el nado con las mismas, que se alimentan en la Antártida, y vienen a los arrecifes y atolones tropicales protegidos, situados en torno a Tonga y otras islas del Pacífico Sur, para aparearse, dar a luz y amamantar a sus crías. En 2008, el número de operadores había aumentado a 14, con la participación de más de 3.000 turistas en la práctica de observación de ballenas cada año2. La mayor parte de los turistas participaba en varias excursiones de observación de ballenas durante una sola visita turística, con un promedio de tres excursiones por visita1. Según las estimaciones, esta industria generó unos ingresos directos e indirectos totales de poco más de 2 millones de USD para Tonga en 20082.
Las ballenas jorobadas que visitan Tonga forman parte de las poblaciones reproductoras de Oceanía, denominadas por la Comisión Ballenera Internacional poblaciones reproductoras E y F3. Esta población se alimenta en la Zona Antártica IV durante el verano del hemisferio sur, y se reproducen en Tonga, Nueva Caledonia, Fiji, Samoa y Niue durante el invierno del hemisferio sur, de julio a octubre. Tras la intensa caza de ballenas en la Antártida, la magnitud de esta población se estimó en unas 250 ballenas en 1964 y actualmente se estima en pocos miles4 con un intercambio limitado entre las diferentes islas de la región5. La población sigue estando clasificada como especie «en peligro» en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN6.
Actualmente hay entre 35 y 50 embarcaciones con licencia para la observación de ballenas en Tonga. De estas, aproximadamente el 20% son de propiedad exclusiva de Tonga, pero muchas con administradores y propietarios extranjeros7. La mayoría de los operadores se encuentran en la isla de Vava'u, que cuenta con un aeropuerto internacional y constituye el centro del turismo de observación de ballenas, pero hay también un número menor de operadores que ofrecen excursiones desde Tongatapu, 'Eua y Ha'apai.
Las embarcaciones son generalmente de eslora inferior a los 10 m y su destino son las aguas protegidas de sotavento de las islas, donde pueden ofrecer a sus clientes la oportunidad de entrar en el agua y nadar con las ballenas en aguas protegidas tranquilas. Los nadadores entran en el agua en grupos de cuatro personas como máximo, acompañadas por un guía de buceo con esnórquel. La preferencia de las excursiones en estas áreas protegidas se centra en la selección frecuente de la observación de las ballenas madres con sus crías, que utilizan también las aguas tranquilas para el amamantamiento, especialmente hacia el final de la temporada7.
Aunque la industria de observación de ballenas creció a un ritmo de poco más del 15% al año entre 1998 y 20082, se considera que hay una serie de factores que limitan el potencial de crecimiento1. Entre los factores cabe incluir la limitada capacidad de viajes aéreos a esta nación de islas remotas, el limitado número de camas de hotel disponibles en las islas y, lo que quizás es más importante, la preocupación por los efectos que la industria pueda producir en esta población de ballenas en peligro1.
Tonga es una monarquía constitucional, y en 1978 emitió un real decreto que prohibía la caza de ballenas y protegía a todos los mamíferos marinos contra la caza directa. La Ley de conservación y ordenación de la pesca de Tonga de 1993 ofreció nuevas protecciones a los mamíferos marinos, pero no incluyó ninguna medida específica para regular la observación de ballenas7. La Ley del Turismo de 1977 permitió al Gobierno aplicar un sistema de permisos en la década de 1990, por el que se limitaba el número de operadores que podían participar en la observación de ballenas cada año. En 2010, el sistema se limitó a 19 permisos, con una autorización de dos embarcaciones por permiso7. Para 2017, esta cifra había aumentado a 28 embarcaciones con licencia en Vava'u y aproximadamente 7 en Ha'apai y 6 ó 7 en Nuku'alofa.
En 1998, el Gobierno de Tonga, el Programa Regional del Pacífico Sur para el Medio Ambiente (SPREP por sus siglas en inglés) y Whales Alive (Ballenas vivas) colaboraron en la elaboración de las directrices para la observación de ballenas, que fueron extraoficialmente aplicadas por algunos operadores, y adaptadas por la Asociación de operadores de observación de ballenas de Tonga para formar sus propias directrices de esta industria en 2001. Durante muchos años, estas fueron las únicas directrices aplicadas, debido a que los subsiguientes proyectos de directrices elaborados para el Gobierno en 2003 y 2005 no se lograron ratificar y aplicar oficialmente7.
En 2008, la Ley de observación de ballenas y de nado con las mismas formalizó el proceso de solicitud de licencias, creando dos categorías separadas de permisos para la observación de ballenas desde embarcaciones y para las interacciones en el agua con las ballenas, y designó oficialmente al Ministerio de Turismo como la autoridad encargada de la gestión de la observación de ballenas7. En 2013 el Gobierno ratificó formalmente un amplio conjunto de directrices, reconociendo el Ministerio de Turismo como la autoridad para emitir licencias, limitar el número de licencias expedidas cada año, y emitir licencias solo a los operadores que pueden satisfacer determinadas condiciones, entre ellas: la prueba de que las actividades previstas no perjudicarán ni pondrán en peligro a las ballenas; la prueba de que el operador y su personal tienen suficientes conocimientos y comprensión de las ballenas y sus necesidades de conservación; y la prueba de que el operador y su personal tienen las "capacidades y los conocimientos necesarios para prestar servicios valiosos a los clientes" (Ministerio de Turismo, 2013).
Las directrices establecen criterios claros de acercamiento para la observación de ballenas desde embarcaciones, helicópteros y el aire, así como para las interacciones en el agua. Algunas de las principales disposiciones de las directrices aplicables al nado con ballenas comprenden:
Las directrices incluyen también una descripción clara de las sanciones por infracciones, que varían de 1.000-5.000 USD para los privados a 10.000-20.000 para los operadores. En 2017 las inspecciones sobre licencias y permisos de los guías eran supervisadas a través del Ministerio de Turismo y el comportamiento de los operadores en el agua era supervisado a través del Ministerio de Policía. El Reglamento sobre la observación de ballenas y el nado con las mismas de 2013 está sometido actualmente en proceso de revisión y de consultas con las partes interesadas.
La industria de observación de ballenas de Tonga se destaca a menudo en la literatura como ejemplo de turismo de observación de ballenas que puede aportar beneficios a las comunidades locales. Es verdad que muchos turistas eligen Tonga como destino de vacaciones, sobre todo por la oportunidad única que ofrece para experimentar interacciones en el agua con las ballenas en las claras aguas tropicales, generalmente protegidas y tranquilas, y seguras para el nado en aguas abiertas7. Sin embargo, las partes interesadas de Tonga, así como los investigadores internacionales son muy conscientes de la importancia de equilibrar los deseos y las expectativas de los turistas y los beneficios económicos locales con el bienestar de la población de ballenas en peligro, objeto de la actividad de observación de la industria.
Entre los desafíos abordados hasta la fecha cabe incluir:
Se indican a continuación las recomendaciones e indicaciones para una gestión mejorada:
Desde que se publicó este estudio de caso, se pueden encontrar nuevos avances en los siguientes enlaces: